RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA

por salakov 15.03.24 9:06

RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA

Concepto: «CORAZÓN».

El corazón. El corazón en un sentido amplio: anatómico, alegórico, simbólico. Dolencias del corazón. Corazones rotos. Lampreas devoradoras de corazones. También vale, no podría ser de otra forma, insertar una canción con la palabra corazón. Hay cienes de ellas.

Escribid esta semana sobre ello. Abrid vuestro corazoncito para mí.

Dos puntos extra para quien inserte “cacoquimio/a”, una de esas palabras hermosas que, por lo que sea, se utiliza poco.

Reglas:

Accesorios varios:

CLASIFICACIÓN IX EDICIÓN:

Clasificación Underground:

Ganador Ronda 1 Edición IX:

Ganador Ronda 2 Edición IX:

Ganador Ronda 3 Edición IX:

Ganador Ronda 4 Edición IX:

Ganador Ronda 5 Edición IX:

Ganador Ronda 6 Edición IX:

ACTAS DE ESTA EDICION, PREVIAS A LA RONDA ACTUAL:

Fichero generales edición IX:
https://docs.google.com/spreadsheets/d/1brTnzsKELYuol1CtUDZDWNeLuDdxrGgtZfJ7Oyanlrk/edit?resourcekey#gid=503060618

RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA Giphy

RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA Giphy

por salakov 15.03.24 9:06

RELATOS A CONCURSO:

1- Ronda 30, el concepto

Corintios 13,14
Le destrocé el corazón.

¡No me jodas! hombre.

2.- Orange Family

Dicen que el corazón es rojo, pero el mío es naranja. También lo son mi cerebro, mi pelo y mis lágrimas.
Tengo una bombilla naranja en mi habitación y la pared es naranja claro. Qué curioso, ¡si a mi madre le encanta el naranja! Tiene vestidos, bolsos y abalorios naranjas. Hasta la alfombra del salón es naranja.
Cuando mi padre la llamaba vaga y desorganizada, cuando la reñía y mi madre lloraba, no sabíamos que el corazón de mamá también era naranja.
Y, ella, al no saber que tenía un alma naranja, asumió que era un desastre que arrasaba con todo lo que tocaba: matrimonio, trabajo, amigos...
Mi corazón no está roto, aunque hace poco que sé que es naranja. Pero el de mamá... tantos años, tantas pérdidas, tantas críticas, tanto dolor... Tremenda cacoquimia.
En mi diagnóstico, ella se vio reflejada. Y sintió una mezcla de alegría y de rabia.

3.- El manuscrito de Edward Herbert

Castle Combe, 15 de diciembre de 1868.

Ante lo incierto de mi destino y dadas las recientes nevadas que impiden abandonar este nefando lugar, me veo obligado a documentar los acontecimientos acaecidos durante las últimas semanas en el caserón Highworth.

Quienes me conocen sabrán de mi determinación por trasladarme aquí tras la extraña desaparición de mi tía, Lady Herbert, contraviniendo cualquier consejo. No siendo yo alma débil, la constante sensación de no hayarme solo y el ominoso sonido, semejante a un monstruoso latido que, hasta ayer, hacía reverberar la trampilla del sótano no perturbaba tanto mi espíritu como el frío que entumece mis huesos desde su ausencia. Frío nada singular en nuestros gélidos inviernos, sin embargo, unos interrogantes me atormentan desde entonces. ¿Por qué mi tía no disponía de hogar o fogón alguno? ¿Qué mantenía el confortable calor del caserón?

Debo bajar al sótano, allí obtendré respuestas.

Fdo.:
Edward Herbert

4.- El corazón de las tinieblas

Caminaba en la oscuridad de la noche con el bulto en brazos, envuelto en unos trapos para protegerlo del frío. En el corazón de Rusia, atravesó la gélida Plaza Roja con la nieve arremolinándose a su alrededor. La ciudad estaba desierta en la madrugada. La catedral de San Basilio emergió imponente ante él. Contempló su magnificencia bajo la capucha. Luego se adentró.
Descendió a las catacumbas, hasta una pequeña sala iluminada por antorchas. Desenvolvió los trapos, observando el corazón palpitante. Lo depositó en el centro, en el suelo. Retrocedió unos pasos.
El corazón latía y un tallo emergió, elevándose, brotando ramas y hojas, ocupando toda la sala. El corazón aumentó de tamaño. Comenzó a resquebrajarse. Un brazo humano emergió de su interior, apoyándose en el suelo. El hombre misterioso retrocedió y huyó, subiendo las escaleras. En el exterior, el viento aullaba y los cuervos coronaron el templo volando en círculos.

5.- La rambla de l’art

Los cines independientes son templos del corazón. Adoro esas pequeñas salas cinematográficas supervivientes del cataclismo de los cines alternativos. Aún hoy quedan unas pocas repartidas por el mundo que albergan ese encanto particular. Sufro cacoquimia cada vez que desaparece uno de ellos porque esos cubículos en peligro de extinción siempre han sido mi refugio. Reconozco que la sístole y diástole se me aceleran cada vez que voy a ver una película. Me invade la curiosidad por saber en quién o en qué me convertiré hoy. Me he transformado en Celine enamorándome hasta el tuétano, he sentido la valentía de la princesa Leia y he volado por los edificios de Nueva York como Spiderman. A través de sus pantallas he generado odio a raudales, mucho amor y también he llorado océanos enteros. Son máquinas del tiempo enmohecidas capaces de hacerme soñar con tan sólo decir: una entrada por favor.

6.- Suspiros heredados

En mi familia, aparte de los ojos castaños, se heredan los suspiros. Una inhalación profunda inconsciente continuada por un alargado “ay”. Se trata de un mantra que nos libera de la cacoquimia y tranquiliza simultáneamente. Estos desalientos van ligados al género femenino, mis tías, mi madre, mi hermana y yo en consecuencia. Algunos de esos “ays” van seguidos de un “dios mío” dependiendo de la ocasión si así lo requiere. La explicación científica concluye en que las extrasístoles que producimos son compensadas con ese chute extra de oxígeno momentáneo. Dicho en otras palabras el corazón se descontrola por un segundo y es nuestra forma de recuperar el ritmo sinusal habitual. Creo que hemos extrapolado dicho efecto a la vida. Cuando se desboca por una nueva afección, una pérdida o un disgusto banal sin más relevancia, un suspiro nos ayuda siempre a volver a la casilla de salida.

7.- Cazador nocturno

Era tan hermosa que no podía dejar de mirarla. Tez lunar, melena azabache, labios carnosos. Los ojos azules, gélidos y brillantes como dos estrellas de hielo. Sus turgentes senos subían y bajaban al ritmo de su respiración. Dentro el corazón palpitante, trémulo y sedoso como una rosa de sangre. Ya no trataba de liberarse. Resignada pero altiva, me clavaba su mirada fría, neutra, casi desafiante. Agarré el mazo y hundí sobre su pecho izquierdo la estaca de madera. Se estremeció y lanzó un alarido. Sus afilados colmillos centellearon, su aliento helado entumeció mis músculos. La habitación convertida en una cámara frigorífica. Vi cómo su cuerpo temblaba hasta expirar, luego encendí un cigarro y agarré el bidón de gasolina. Las llamas coronaban el edificio cuando salí a la calle. Una ráfaga de viento abrasador explotó en mi cara. El calor me envolvía como una sábana de fuego. Seguía tiritando de frío.

8.- El perdido arte del trueque

Iba pasando ante mi vista los cromos de su mazo, pero no había ni uno que mereciese la pena. Me ofreció el de Casillas, como si fuera la rehostia, pero yo ya lo tenía repetido cinco veces. Pude oler su miedo, vi la desesperación reflejada en su rostro y el deseo con que miraba el mío de Mendieta. Supe que era mi oportunidad.
La madre de Javier no se explica cómo ha podido perder su pañuelo, ese azul tan bonito que siempre se ponía cuando iba a recogerlo al colegio. Lo saco de debajo de la almohada y lo acerco a mi nariz. Huele igual que ella.
Apago la luz y pienso en los ojos verdes de la madre de Javier. Un pájaro despierta en mi corazón y agita las alas con fuerza.

9.- Ass de corazones

En el Departamento de Observación, habían detectado el primer planeta habitable con forma no esférica. No había consenso en la Agencia: ¿Culo o Corazón? Dependía de cómo se viera o del momento de rotación. Según nos aproximamos, yo veía un corazón, el color rojizo de su superficie me daba esa impresión. Además, la nave captaba unas señales térmicas extrañas que eran emitidas rítmicamente.

Aterrizamos para explorar mejor, y lo que vimos es inenarrable. Aquello era una batalla entre distintas especies, o la misma, según como se viera. Un animal que parecía un corazón con patas, emitía un pulso que embobaba a sus contrincantes, antes de eliminarlos. El otro, de misma forma, pero al revés, un culo con patas, emitía unas flatulencias aturdiendo antes de atacar. Huimos antes de vernos involucrados. Sin ver que un volcán acababa de hacer erupción en el centro superior del planeta.
Descartamos la colonización del mismo.

10.- Femme Fatale

Su corazón era un portero automático,
una noria, un colibrí,
un aeropuerto,
un líquido amniótico en vaso de tubo
que querrías beber sin mezclarlo con nada.

Su corazón era un remolino,
tragaba tu orgullo, tus expectativas, tu aliento.
Era un demonio echándose la siesta.
Era aquella lagartija que mudó diez veces su cola.

Su corazón era la fiebre de todos los días,
el algoritmo milagroso que te quitaba el cielo de las manos.
Su corazón era la serpiente del encantador de serpientes
que hacía la ouija con tu cuello.

Su corazón se cayó de un cuarto piso
después de tantos tumbos barbitúricos
y nos puso a a todos a llorar.
Fue tan tremenda la despedida como lo fue su soledad.

11.- All Iron

Una maldición medieval asolaba el pueblo de Yermouth-by-the-sea. Desde hacía siglos, un dragón demandaba el sacrificio anual del corazón de una virgen. La mujer no podía tener menos de veintiún años, las directrices del dragón eran claras, y en Inglaterra costaba encontrar vírgenes a esa edad. ¡Ay, se extinguieron todas las santurronas en la pérfida Albión! Ahora las chiquillas inglesas obraban disolutas y licenciosas, bebiendo a morro de las fuentes del deseo, apurando Tinder como quien rebaña del plato. Fue entonces cuando a Yermouth-by-the-sea arribó Aitziber, una chica de intercambio de Urretxu. Aitziber les habló de un lugar mágico: Euskal Herria. Territorio casto y pacato, acullá los jóvenes ni siquiera miraban a las muchachas. Incapaces de dar el paso, ensimismados en sus vasos de kalimotxo, dentro de sus fronteras no se conocían coitos. Los ciudadanos de Yermouth-by-the-sea miraron sedientos el pecho de Aitziber. Su corazón latía con fuerza. ¡Alirón!

12.- Roturas

Lo del corazón roto no es para mí, porque mi corazón siempre ha funcionado perfecto, ningún percance le afecta, y que dure. Lo que se me rompe con cada desengaño es el cerebro: pensamientos intrusivos, obsesión, autocompasión a unos extremos que serían nauseabundos hasta para Morrissey… Tras la rotura del cerebro, llega la del hígado, porque entonces bebo más que una despedida de solteras de Liverpool. Y tras la rotura del hígado, llega la de la dignidad, porque no sólo estoy siempre borracha, sino que encima soy una borracha patética, llorona, que ni a sus amigos divierte, que envía cientos de wasaps de audio entre sollozos, repletos de insultos y súplicas o que acecha en los portales en caso de que me hayan bloqueado. Así que, cariño: no me dejes. Porque no me vas a romper el corazón: voy a romper tu paciencia.

13.- La decisión

“Corazón, con cada latido, queda uno menos, lo sé. Sé que el corazón es una bomba con temporizador con la cuenta atrás oculta y que memento mori y que omnia vulnerant, ultima necat y todas esas gilipolleces... Aunque hoy vives, estás aquí, tu corazón late... y sigue latiendo: un saco de latidos sin sentido. Pero tu vida importa y no es sólo tuya… porque vas a ser mamá, otra de esas locas que traen vidas a este mundo de mierda y te juro que el corazón de esta criatura va a disfrutar de cada puto amanecer, a sonreírle a la luna, a recibir caricias y abrazos y a reír a carcajadas. ¡Reacciona! Si no puedes sola, busca ayuda, pero levanta la cabeza, respira hondo y sal de tu pozo…”. Mirando al espejo, mi cerebro dijo “Lo intentaré”; recordando a Yoda, mi corazón dijo “Lo haré”.

14.- Sonny_Jim

Se le puede distinguir porque siempre lleva una caja de cartón bajo el brazo izquierdo, con la naturalidad con la que llevaría un sombrero sobre su cabeza. No es un bulto, sino un complemento.
Nació con el corazón extracorpóreo, resultado de, según su madre, las prisas con las que su padre los llevó al hospital. «¿Ves? Tanto correr y el niño ha llegado con el corazón fuera. Del esfuerzo»
Los días de partido se deja ver en San Mamés, donde muestra orgulloso el contenido: su corazón con franjas rojas y blancas de aurícula a ventrículo rematado en la melena de un león macho.
Cada vez que le hablan de una posible cirugía, él dice que no, con la cabeza y con el corazón.

15.- El corazón de Midlothian

A la altura de la catedral de Saint Giles, de camino al cementerio Greyfriars, Dani nos detuvo y dijo que si queríamos volver a Edimburgo teníamos que escupir sobre un corazón dibujado con trozos de granito sobre la calzada. Así lo hicimos, cada uno de forma más asquerosa que el anterior.

Cuando llegamos al cementerio era de noche y estaba vacío, pero desde la entrada se veía luz en un mausoleo. Al acercarnos vimos que tras una verja había una vela. Quise hacerme el valiente y, entre risas, traspasé aquella cerca. La vela se apagó de repente y desde entonces no recuerdo nada.

Al día siguiente, me desperté en un hospital. Una enfermera me preguntaba cómo estaba con un marcado acento escocés. Mientras palpaba mi cuerpo, estaba lleno de moratones, le contesté que lo último que recordaba era haber escupido sobre un corazón pintado enfrente de una catedral.

16.- Soltando lastre

Su corazón de oro era tan pesado que había caído hasta uno de sus pies, ahora lo arrastraba por toda la ciudad. Eran incontables las cosas que había hecho por los demás, mas solo recibía excusas cuando él necesitaba un favor. Cansado del desequilibrio decidió subir a una montaña a pensar, pero su corazón era tan pesado que se detuvo a medio camino. Estaba sentado al sol, sintiéndose tranquilo por primera vez en mucho tiempo cuando escuchó en la lejanía a una multitud gritar su nombre. Entonces con una navaja extirpó su corazón de oro, coronó la montaña y se alejó de allí para siempre.

17.- La caja de Cacoquimia

Ayyy, el corazón cuando se rompe... no se recupera. Ahí quedan las cicatrices haciendo mella para siempre. Y uno finge recuperarse y que "aquello" que tanto daño hizo ya se olvidó, pero... no es cierto.

Pues las rupturas del corazón, señores, no tienen cura, aunque sea enorme su capacidad para acumular varias capas de dolor a lo largo de la vida. Es a esa costra de desengaños, de decepciones, de desamor a lo que, eufemísticamente, se le llama "experiencia"...

Por eso, tomaté hoy una Heineken (o unas cuantas) que mañana será otro día.

Heineken, acompañándonos en este mundo miserable desde hace 150 años. Bebe responsablemente, solo para olvidar. No te empepines a lo tonto.

¡Eres Heineken, eres vida!

18.- Cachitos de corazón

La primera vez tenía apenas ocho años. Ella me rompió el corazón cuando se fue del colegio con su mochila azul y sus ojos dormilones. Con gran inquietud, saqué mi corazón roto, sustituyéndolo por uno que construí con las piezas de un radiocasete. Ella, mi chica, me lo destrozó cuando se fue con aquel mamón en su Ford Fiesta blanco. Lo reemplacé por uno que forjé con cachitos de hierro y cromo, pero me duró poco: Ella, mi nena, no volvió a llamar y el amanecer me sorprendió dormido y borracho, triste y solitario. No me rayé y fabriqué el repuesto con trozos de vinilo, pero de nuevo Ella, mi princesa, lo destruyó en apenas dos años, con esa especie de mueca y esa forma de hacerme daño. Tejí uno con las cuerdas de una guitarra. Y Ella, mi sirena, volvió a ser la más guapa, pero la menos buena.

19.- La dolorosa

Tan altos, tan pálidos, de riguroso negro. Solíamos llamar la atención, pero aquel verano éramos casi una aparición. Los vecinos se persignaban cuando entrábamos en las iglesias.
―¿Van a entrar, con esa pinta?
―Como pongan un pie dentro echan a arder.
Lo hacíamos por Nacho. Era un coleccionista furibundo, y ya le quedaban pocas estampillas por conseguir. Y aún menos tiempo.
―Pero miradla, ¿no veis qué expresión de dolor? ¿No veis la cacoquimia en su mirada?
―No sé, Nacho, es como todas las demás.
Me fijé en la figura. Tenía el rostro anegado en lágrimas y las manos en el pecho, sujetando un corazón atravesado por siete espadas.
―¡Han puesto espadas! ¡Qué kitsch!―repetía Nacho embelesado, cogiendo una estampita de las pocas que le faltaban ya.
Pensé en su madre, que heredaría la colección en unos meses.
―Venga, que si nos damos prisa aún llegamos a ver una más.

20.- Fuera del cuerpo muerto

Empezó siendo un trabajo duro: ella siempre tenía miedo. Gritos y terror cuando estaba despierta, pesadillas cuando dormía, y él tan pequeño y frágil, casi no podía con todo, se sentía estallar en aquel pecho sufriente. Pero fueron creciendo, juntos, y se hicieron fuertes. Ahora era su cuerpo el que gritaba, echaba al miedo fuera y no lo acongojaba, aunque le seguía exigiendo: en las peleas, en los ataques de ira, poniendo el coche a 200, llegaba al límite. Hasta aquel último día. De pronto dejó de recibir órdenes y se hizo el silencio, sólo notaba el impulso preciso para seguir latiendo, y lo sacaron al frío, y quedó como muerto, antes de coserlo a otras arterias y encajarlo dentro de otro pecho. Latió. Allí se estaba bien, no notaba congoja, ni ira, y latió como cantando, paladeando la serenidad y la alegría, sorprendido por la suerte de la segunda oportunidad.

21.- La danza del silencio

En la penumbra de mi apartamento, la oscuridad se apoderó de los rincones, devorando incluso el eco de mis propios pasos. Un apagón, un silencio inusual. En medio de esta soledad forzada, un golpeteo insistente interrumpió mi vacío retiro. Irritado, busqué su origen, atribuyéndolo a los vecinos o al inexistente reloj en mi pared. El ritmo, perturbador, perforaba mi mente. Recostado en la cama, el latido insistente de mi pecho me envolvió. Una realización tardía: el golpeteo no era más que el eco de mi propio corazón, un órgano olvidado que reclamaba su presencia. En ese reconocimiento, una calidez me abrazó. Una sonrisa, ajena durante años, se esbozó en mi rostro. La luz retornó, pero cerré las persianas y apagué todo, me sobraba. Preferí la oscuridad, entregándome a un sueño reparador, con las manos cruzadas sobre el pecho, como un renacimiento tardío, un regreso a la serenidad de la infancia.

por salakov 15.03.24 9:07

FORMULARIO:

por Esmeralda 15.03.24 9:12

RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA 20240310

Me he sacado el mío para airearlo

por tacitus 15.03.24 9:17

Entro, dejo video, saludo y me voy

No prometo participar
Tampoco prometo no participar
Puede ser que sí, puede ser que no

Recomiendo ver ese video con fan bailando y snippets

por Eduardo Montenegro 15.03.24 9:19

De corazón os digo que este es un temazo de corazón.

Un microrrelato musicado.

Dadle al play y mejorará este viernes.

por salakov 15.03.24 9:28

"Corazón", de Vicente Luis Mora.

RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA Coraz-n-Vicente-Luis-Mora

por Aurora 15.03.24 9:36

por m señor 15.03.24 9:44

Un concepto.....
RONDA 9.30 DEL CORAZONADO CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA 200.gif?cid=f9f38a391cn9i2uq7l8pfomxdr0vy873rcw02cf6n0vm700m&ep=v1_gifs_search&rid=200

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m

por Aurora 15.03.24 9:58

Hace un año, no sé si fue antes o después de el día del padre, Sala dirigía la ronda y había que escribir sobre el día del padre. Yo me metí en el foro a comprar una entrada para el Azkena y, como estaba de baja, tuve tiempo de fisgar eso llamado La Plazoleta que no sabía lo que era. Y los de los micros estabais en lo alto del foro y me puse a fisgar. Y vi que alguien estaba en Londres, que otro decía que si se valía escribir de otra cosa que no fuera el padre o algo así (creo que era Montenegro) y otras cosas más que me parecieron muy graciosas. Yo nunca había estado en un foro de este tipo, y se notaba. No sé por qué, escribí algo. Os quedasteis flipados, no sabíais quién era Aurora. Yo también flipaba de que os flipase mi intervención en el foro.
Creo que me escribió Zzzz para advertirme de lo que pasaba. Salakov insinuaba que yo tenía un badajo como un campano, Vinny me llamó machista... bueno, me llevé algún que otro disgusto porque yo aquí me lo pasaba bien y no me quería ir.

Y, lo más importante, escribí el primer microrrelato de mi vida: La vaca del cliente de papá, creo que se llevó 3 puntitos.

Y luego os he conocido a algunos.

Aún no he ganado ninguna ronda, y eso me hace que pensar, con lo que me cuesta... bueno, no siempre. Cuando con más desidia escribo, más puntuación obtengo.

Orgullosa de ser considerada parte de esta comunidad de microrrelatismo, jamás en mi vida me hubiera imaginado escribiendo microrrelatos.

Así que espero que la vida me siga deparando sorpresas tan bonitas (y tan difíciles) como esta, aunque me gustaría escribir como los mejores y estar agotada de tener que preparar ronda tras ronda, la verdad. Quisiera tener vuestro talento.

Abrazaco, como decís vosotros. Un besazo también.

(no tengo tiempo de repasar lo que he escrito así que, si hay algún error, me disculpen)

por AtticusFish 15.03.24 10:13

por Aurora 15.03.24 10:18

por AtticusFish 15.03.24 10:29

En esta hay que tener un poco de paciencia hasta que aparece el corazón, pero merece la pena Wink

.

por Nomeko7 15.03.24 11:05

Sólo se me vienen a la cabeza recetas de casquería. Corazón con ajo, vino blanco y laurel.

por LeChaperonRouge 15.03.24 11:24

Nomeko7 escribió:Sólo se me vienen a la cabeza recetas de casquería. Corazón con ajo, vino blanco y laurel.

Mis puntos aquí

por LeChaperonRouge 15.03.24 11:25

Me gusta el concepto, muy amplio, bonito y visceral.

por Zzzz 15.03.24 11:40

Bueno, para ser un concepto está bien. Espero, maese, que esta obsesión última suya con los corazones no tenga que ver con la revisión médica esa que nos tiene en un ay y que en cualquier caso sea cosa de poco.

por salakov 15.03.24 12:11

Os cuento: el sábado estuve de fiesta en Asturias. Chuflón over the rocks. Cumpleaños de Esmeralda. Bebimos mucho vodka y también fumamos un poco. O un mucho, no sé. Si no vimos amanecer, al menos vimos clarear el domingo. Y la cosa, ups, es que el lunes tenía la revisión médica de la empresa.

Viajamos al lunes. Revisión médica rutinaria. Me miran los oídos, me miran la vista, lo típico. En esto, me hacen un electro y al médico le cambia la cara. «Vamos a repetir el electro, ¿vale?». Lo repite y hace un mohín de disgusto. Llama a otro médico. «Mira», me dicen, «tienes una arritmia y ahora mismo pedimos un taxi para que vayas a Urgencias». «Pero yo puedo conducir», respondo. «No, pero en tu condición actual te puedes marear y es mejor que vayas en taxi», me dicen mirándome como quien mira a un muerto.

Lunes 10:15 a.m., estoy en Urgencias. Me repiten el electro. Efectivamente, sale una arritmia. Fibrilación auricular. Me dan un volante urgente para el cardiólogo. «¡Mecagondios!», pienso. «¡Soy un cadáver andante! ¡Un puto muerto viviente!».

Viajamos al miércoles. Voy al cardiólogo y, ¡oh!, la arritmia ha desaparecido. También me hace un ecocardiograma y todo OK. No obstante, me manda pruebas adicionales.

Ahora tengo un volante para un TAC, un HOLTER y un análisis de tiroides. Y, lo peor de todo, a mi hermana pequeña echándome la bronca para que deje de fumar.

Moraleja: no os paséis con el vodka, mirad lo que ocurre. Síndrome del Corazón Festivo, se llama. Lo he buscado. Holiday Heart.

https://cuidateplus.marca.com/bienestar/2019/12/27/arritmia-despues-beber-alcohol-puedes-sindrome-corazon-festivo-171595.html

Spoiler:

por salakov 15.03.24 12:16

Y me he dado cuenta hace unos minutos de que el jueves tengo concierto de Depeche Mode, así que la gala será muuuuuuuy tardía.

Aviso para navegantes. whistling2

por Zzzz 15.03.24 12:21

Bueno, no es cosa de broma, pero tampoco parece cosa de estar a las puertas del cementerio.

No descarte lo más mínimo que el electro tuviese cincuenta años y fallase. Y no lo digo por decir, sino porque nos pasó hace años con mi hijo (que con cinco años que tendría todavía no bebía ni fumaba porros) y cuando nos tocó repetir la prueba, en otro sitio distinto, salió absolutamente normal y fue entonces cuando nos dijo el primer médico que a veces no funcionaba muy bien el electro, el hijo de mil putas. No veas qué días pasamos.

por salakov 15.03.24 12:22

Yo echo las culpas a los asturianos.

De todo.

por Zzzz 15.03.24 12:23

Y recuerde. Si le meten un dedo en el culo para ver si se sobresalta será una prueba extrictamente cardiaca.

por salakov 15.03.24 12:34

Pero dejemos de contar las pastillas que tomamos... que empieza el baile.

¡Llega el primer relato! cheers

por salakov 15.03.24 12:34

1- Ronda 30, el concepto

Corintios 13,14
Le destrocé el corazón.

¡No me jodas! hombre.

.

por Felix the cat 15.03.24 12:51

Esta canción solía partirme en dos. Hoy, ya viejales, me parte en tres.

por salakov 15.03.24 13:13

Esta ronda está amplificando los sentimientos.

Acabaremos llorando, verás.

por Eduardo Montenegro 15.03.24 13:20

salakov escribió:Yo echo las culpas a los asturianos.

De todo.

Ya no se hacen vascos como los de antes.

por salakov 15.03.24 13:22

Eduardo Montenegro escribió:
salakov escribió:Yo echo las culpas a los asturianos.

De todo.

Ya no se hacen vascos como los de antes.

¡Es que mi padre es de Cuenca!

por Eduardo Montenegro 15.03.24 13:26

salakov escribió:
Eduardo Montenegro escribió:
salakov escribió:Yo echo las culpas a los asturianos.

De todo.

Ya no se hacen vascos como los de antes.

¡Es que mi padre es de Cuenca!

Hay otras teorías que no mencionan el vodka pero sí la impericia al volante, que también algo de eso hubo, contémoslo todo...

https://salutaprop.org/es/blog/sustos-que-consecuencias-pueden-tener-para-el-corazon

Me reafirmo: Nos ha llegado una remesa de vascos defectuosa, qué bajona.

por Eduardo Montenegro 15.03.24 13:36

salakov escribió:
Eduardo Montenegro escribió:
salakov escribió:Yo echo las culpas a los asturianos.

De todo.

Ya no se hacen vascos como los de antes.

¡Es que mi padre es de Cuenca!

Un saludo para Cuenca, de corazón.

por salakov 15.03.24 13:37

Oh, qué cabrón. Laughing

por Esmeralda 15.03.24 13:43

salakov escribió:Os cuento: el sábado estuve de fiesta en Asturias. Chuflón over the rocks. Cumpleaños de Esmeralda. Bebimos mucho vodka y también fumamos un poco. O un mucho, no sé. Si no vimos amanecer, al menos vimos clarear el domingo. Y la cosa, ups, es que el lunes tenía la revisión médica de la empresa.

Viajamos al lunes. Revisión médica rutinaria. Me miran los oídos, me miran la vista, lo típico. En esto, me hacen un electro y al médico le cambia la cara. «Vamos a repetir el electro, ¿vale?». Lo repite y hace un mohín de disgusto. Llama a otro médico. «Mira», me dicen, «tienes una arritmia y ahora mismo pedimos un taxi para que vayas a Urgencias». «Pero yo puedo conducir», respondo. «No, pero en tu condición actual te puedes marear y es mejor que vayas en taxi», me dicen mirándome como quien mira a un muerto.

Lunes 10:15 a.m., estoy en Urgencias. Me repiten el electro. Efectivamente, sale una arritmia. Fibrilación auricular. Me dan un volante urgente para el cardiólogo. «¡Mecagondios!», pienso. «¡Soy un cadáver andante! ¡Un puto muerto viviente!».

Viajamos al miércoles. Voy al cardiólogo y, ¡oh!, la arritmia ha desaparecido. También me hace un ecocardiograma y todo OK. No obstante, me manda pruebas adicionales.

Ahora tengo un volante para un TAC, un HOLTER y un análisis de tiroides. Y, lo peor de todo, a mi hermana pequeña echándome la bronca para que deje de fumar.

Moraleja: no os paséis con el vodka, mirad lo que ocurre. Síndrome del Corazón Festivo, se llama. Lo he buscado. Holiday Heart.

https://cuidateplus.marca.com/bienestar/2019/12/27/arritmia-despues-beber-alcohol-puedes-sindrome-corazon-festivo-171595.html

Spoiler:

Si es que el chirrisclás es un matavascos, qué decepción:lol: . O que con tanto petardo y fuego artificial y el camino te pusieras nervioso, que todo influye

por Toro 15.03.24 13:45

Cabeceras actualizadas!!! cheers

(La ronda 26 pendiente, que aún no tengo claro como incluirla...)

Reglas:

Accesorios varios:

CLASIFICACIÓN IX EDICIÓN:

Clasificación Underground:

Ganador Ronda 1 Edición IX:

Ganador Ronda 2 Edición IX:

Ganador Ronda 3 Edición IX:

Ganador Ronda 4 Edición IX:

Ganador Ronda 5 Edición IX:

Ganador Ronda 6 Edición IX:

Ganador Ronda 7 Edición IX:

Ganador Ronda 8 Edición IX:

Ganador Ronda 9 Edición IX:

Ganador Ronda 10 Edición IX:

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Ganador Ronda 13 Edición IX:

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Ganador Ronda 15 Edición IX:

Ganador Ronda 16 Edición IX:

Ganador Ronda 17 Edición IX:

ACTAS DE ESTA EDICION, PREVIAS A LA RONDA ACTUAL:

Fichero generales edición IX:
https://docs.google.com/spreadsheets/d/1brTnzsKELYuol1CtUDZDWNeLuDdxrGgtZfJ7Oyanlrk/edit?resourcekey#gid=503060618

por Toro 15.03.24 13:51

Aurora escribió:Hace un año, no sé si fue antes o después de el día del padre, Sala dirigía la ronda y había que escribir sobre el día del padre. Yo me metí en el foro a comprar una entrada para el Azkena y, como estaba de baja, tuve tiempo de fisgar eso llamado La Plazoleta que no sabía lo que era. Y los de los micros estabais en lo alto del foro y me puse a fisgar. Y vi que alguien estaba en Londres, que otro decía que si se valía escribir de otra cosa que no fuera el padre o algo así (creo que era Montenegro) y otras cosas más que me parecieron muy graciosas. Yo nunca había estado en un foro de este tipo, y se notaba. No sé por qué, escribí algo. Os quedasteis flipados, no sabíais quién era Aurora. Yo también flipaba de que os flipase mi intervención en el foro.
Creo que me escribió Zzzz para advertirme de lo que pasaba. Salakov insinuaba que yo tenía un badajo como un campano, Vinny me llamó machista... bueno, me llevé algún que otro disgusto porque yo aquí me lo pasaba bien y no me quería ir.

Y, lo más importante, escribí el primer microrrelato de mi vida: La vaca del cliente de papá, creo que se llevó 3 puntitos.

Y luego os he conocido a algunos.

Aún no he ganado ninguna ronda, y eso me hace que pensar, con lo que me cuesta... bueno, no siempre. Cuando con más desidia escribo, más puntuación obtengo.

Orgullosa de ser considerada parte de esta comunidad de microrrelatismo, jamás en mi vida me hubiera imaginado escribiendo microrrelatos.

Así que espero que la vida me siga deparando sorpresas tan bonitas (y tan difíciles) como esta, aunque me gustaría escribir como los mejores y estar agotada de tener que preparar ronda tras ronda, la verdad. Quisiera tener vuestro talento.

Abrazaco, como decís vosotros. Un besazo también.

(no tengo tiempo de repasar lo que he escrito así que, si hay algún error, me disculpen)

Viendo el concepto de la ronda, esto era para salakov y en privado, luego ya lo votaríamos Wink

por Aurora 15.03.24 14:14

¡Claro que tienes que dejar de fumar! Yo lo dejé, también, por un susto que tuve con la salud el año pasado. Si no, creo que no hubiera sido capaz.

Así que aprovecha el susto que te han dado. Mi hermano mayor, médico, también se pasaba el día diciéndome que dejase de fumar, que si viese yo lo que él ve en el hospital...

Pero cuesta. Yo me ayudé de Todacitan, pero lo logré con la tercera caja de Todacitan, fracasé dos veces y, a lo largo de mi vida, habré fracasado 20 veces. Espero no volver a caer. Por eso no bebo alcohol, sé que como me vaya de vinos no voy a poder resistir las ganas de un cigarro.

por Aurora 15.03.24 14:16

Toro escribió:
Aurora escribió:Hace un año, no sé si fue antes o después de el día del padre, Sala dirigía la ronda y había que escribir sobre el día del padre. Yo me metí en el foro a comprar una entrada para el Azkena y, como estaba de baja, tuve tiempo de fisgar eso llamado La Plazoleta que no sabía lo que era. Y los de los micros estabais en lo alto del foro y me puse a fisgar. Y vi que alguien estaba en Londres, que otro decía que si se valía escribir de otra cosa que no fuera el padre o algo así (creo que era Montenegro) y otras cosas más que me parecieron muy graciosas. Yo nunca había estado en un foro de este tipo, y se notaba. No sé por qué, escribí algo. Os quedasteis flipados, no sabíais quién era Aurora. Yo también flipaba de que os flipase mi intervención en el foro.
Creo que me escribió Zzzz para advertirme de lo que pasaba. Salakov insinuaba que yo tenía un badajo como un campano, Vinny me llamó machista... bueno, me llevé algún que otro disgusto porque yo aquí me lo pasaba bien y no me quería ir.

Y, lo más importante, escribí el primer microrrelato de mi vida: La vaca del cliente de papá, creo que se llevó 3 puntitos.

Y luego os he conocido a algunos.

Aún no he ganado ninguna ronda, y eso me hace que pensar, con lo que me cuesta... bueno, no siempre. Cuando con más desidia escribo, más puntuación obtengo.

Orgullosa de ser considerada parte de esta comunidad de microrrelatismo, jamás en mi vida me hubiera imaginado escribiendo microrrelatos.

Así que espero que la vida me siga deparando sorpresas tan bonitas (y tan difíciles) como esta, aunque me gustaría escribir como los mejores y estar agotada de tener que preparar ronda tras ronda, la verdad. Quisiera tener vuestro talento.

Abrazaco, como decís vosotros. Un besazo también.

(no tengo tiempo de repasar lo que he escrito así que, si hay algún error, me disculpen)

Viendo el concepto de la ronda, esto era para salakov y en privado, luego ya lo votaríamos

Pero son más de 150 palabras!

por salakov 15.03.24 15:22

El chirrisclás no me da miedo.

¡El espíritu errante del rodaballo asturiano, eso sí que temo!

por Esmeralda 15.03.24 15:35

salakov escribió:El chirrisclás no me da miedo.

¡El espíritu errante del rodaballo asturiano, eso sí que temo!

La próxima hacemos una parrillada de pescado Laughing

por Nomeko7 15.03.24 16:25

Yo soy de Cuenca y esta tarde me junto con asturianos. Helado

por salakov 15.03.24 16:42

por Zzzz 15.03.24 16:51

Pues yo suelo quedar con una pareja asturiana y quitando que él va en niqui a diez bajo cero y da frío ajeno, no me han causado ningún mal.

Claro, estos no son de los que tienen droga, sino de los que la requisan, los cabrones.

por Aurora 15.03.24 17:13

Nomeko7 escribió:Yo soy de Cuenca y esta tarde me junto con asturianos.

Yo soy de Palencia y esta tarde me junto con alemanes.

por salakov 15.03.24 18:34

¡Y llega el segundo relato!

por salakov 15.03.24 18:35

2.- Orange Family

Dicen que el corazón es rojo, pero el mío es naranja. También lo son mi cerebro, mi pelo y mis lágrimas.
Tengo una bombilla naranja en mi habitación y la pared es naranja claro. Qué curioso, ¡si a mi madre le encanta el naranja! Tiene vestidos, bolsos y abalorios naranjas. Hasta la alfombra del salón es naranja.
Cuando mi padre la llamaba vaga y desorganizada, cuando la reñía y mi madre lloraba, no sabíamos que el corazón de mamá también era naranja.
Y, ella, al no saber que tenía un alma naranja, asumió que era un desastre que arrasaba con todo lo que tocaba: matrimonio, trabajo, amigos...
Mi corazón no está roto, aunque hace poco que sé que es naranja. Pero el de mamá... tantos años, tantas pérdidas, tantas críticas, tanto dolor... Tremenda cacoquimia.
En mi diagnóstico, ella se vio reflejada. Y sintió una mezcla de alegría y de rabia.

.

por LeChaperonRouge 15.03.24 19:03

Esmeralda escribió:
salakov escribió:Os cuento: el sábado estuve de fiesta en Asturias. Chuflón over the rocks. Cumpleaños de Esmeralda. Bebimos mucho vodka y también fumamos un poco. O un mucho, no sé. Si no vimos amanecer, al menos vimos clarear el domingo. Y la cosa, ups, es que el lunes tenía la revisión médica de la empresa.

Viajamos al lunes. Revisión médica rutinaria. Me miran los oídos, me miran la vista, lo típico. En esto, me hacen un electro y al médico le cambia la cara. «Vamos a repetir el electro, ¿vale?». Lo repite y hace un mohín de disgusto. Llama a otro médico. «Mira», me dicen, «tienes una arritmia y ahora mismo pedimos un taxi para que vayas a Urgencias». «Pero yo puedo conducir», respondo. «No, pero en tu condición actual te puedes marear y es mejor que vayas en taxi», me dicen mirándome como quien mira a un muerto.

Lunes 10:15 a.m., estoy en Urgencias. Me repiten el electro. Efectivamente, sale una arritmia. Fibrilación auricular. Me dan un volante urgente para el cardiólogo. «¡Mecagondios!», pienso. «¡Soy un cadáver andante! ¡Un puto muerto viviente!».

Viajamos al miércoles. Voy al cardiólogo y, ¡oh!, la arritmia ha desaparecido. También me hace un ecocardiograma y todo OK. No obstante, me manda pruebas adicionales.

Ahora tengo un volante para un TAC, un HOLTER y un análisis de tiroides. Y, lo peor de todo, a mi hermana pequeña echándome la bronca para que deje de fumar.

Moraleja: no os paséis con el vodka, mirad lo que ocurre. Síndrome del Corazón Festivo, se llama. Lo he buscado. Holiday Heart.

https://cuidateplus.marca.com/bienestar/2019/12/27/arritmia-despues-beber-alcohol-puedes-sindrome-corazon-festivo-171595.html

Spoiler:

Si es que el chirrisclás es un matavascos, qué decepción:lol: . O que con tanto petardo y fuego artificial y el camino te pusieras nervioso, que todo influye

No se puede competir con los asturianos, la sidra y el rodaballo radiactivo les hacen inmortales. Son los monstruos de la pantalla final.

por Felix the cat 15.03.24 20:03

Por alguna razón, y ya se sabe que el corazón tiene razones que la razón no entiende, se me ha venido esto de abajo a la cabeza. Iba a pasar, pero como os lo merecéis, todo y más, ahí va la joyita:

por Criminal pentatónico 15.03.24 20:11

Esta canción es superlativa:

por Aurora 15.03.24 20:24

Yo, como Félix, aprovecho y cuelo aquí una de las canciones más bonitas que existen sobre heartbreaks, aunque la palabra corazón no aparezca en el título.
En realidad, todo el Rumours es about pain, despecho y heartbreak. Masterpiece donde las haya.

por Criminal pentatónico 15.03.24 20:36

Solo tengo un corazón y a ti ya te lo he dado...

por Zzzz 15.03.24 21:17

Cuidado que es fea la palabra cacoquimia. Mezcla de caca y quimio. Veinte puntos tendría que valer.