ESPUTO ACIDO

Emily Remler, nacida el 18 de Septiembre de 1957 y fallecida el 04 de Mayo de 1990, fue una guitarrista de Jazz Judía nacida en Nueva York que alcanzó la fama en la década de los 80. Remler está considerada la más brillante del colectivo de mujeres guitarristas de Jazz de Estados Unidos. Grabó siete álbumes de Hard Bop, Jazz, Blues y Jazz Fusión antes de morir de un inesperado ataque al corazón a la edad de 32 años, en Connells Point, mientras hacia una gira por Australia. En sus grabaciones podemos escuchar su fluida inspiración, una hermosa articulación y unas dotes para la rítmica excelentes. Emily Ramler fue apoyada y apadrinada por artistas de la talla del legendario héroe de la guitarra Herb Ellis, que siempre se refirió a ella como "la nueva súper estrella de la guitarra". Álbumes como “Firefly" o “Catwalk" son verdaderas obras de arte de su instrumento y su género. Poco antes de su inesperada muerte, colaboró con Larry Coryel en el álbum “Together”, un trabajo conjunto lleno de dinamismo e inventiva. Emily Remler fue una pionera, con su “Gibson ES-330” recorría ya con apenas 20 años los más prestigiosos lugares de la escena Jazzera Americana, desplegando su enorme potencial que, desgraciadamente, quedó bruscamente truncado a la edad de 32 años, dejando una plaza vacía que será muy difícil de ocupar.

"Breve Apunte Sobre Una Guitarrista Genial"

Emily Remler nació en la ciudad de Nueva York y comenzó a tocar la guitarra a la edad de 10 años. En un comienzo se sintió influenciada e inspirada por la música Hard Rock y por otros géneros de la música popular hasta que sufrió, entre 1974 y 1976, una epifanía musical durante sus años de estudio en la “Berklee College of Music” de Boston, Massachusetts. En esa época comenzó a escuchar a las grandes leyendas del Jazz como Wes Montgomery, Miles Davis y John Coltrane. Desde ese momento comenzó a interesarse con feroz intensidad por el Jazz, practicando casi constantemente, y ya nunca volvió a sus influencias anteriores. Su evolución como instrumentista y como música fue tan rápida que poco después de dejar la “Berklee College of Music” ya tocaba tocaba en los más prestigiosos clubs de Blues y Jazz de Nueva Orleans, trabajando con grupos como FourPlay and Little Queenie y The Percolators. Poco después, en 1981, comenzó una carrera en solitario que la llevó a la fama. Emily Ramler fue apoyada por artistas de la talla del legendario héroe de la guitarra Herb Ellis, que siempre se refirió a ella como "la nueva súper estrella de la guitarra".
Su primera guitarra fue la de su hermano mayor, una “Gibson ES-330”, mientras que su potente guitarra eléctrica “Borys B120 HollowBody Electric” fue su instrumento preferido a finales de los 80s. Sus guitarras acústicas incluían una colección de guitarras “Ovation” de 1984 y varias guitarras “Korocusci Classical”, de cuerda de nylon, para sus piezas de Bossa Nova.
En una entrevista para la revista “People”, Emily dijo de sí misma: "puedo parecer la típica niña buena Judía de Nueva Jersey, pero en mi interior soy un corpulento y poderoso hombre de raza negra de 50 años como Wes Montgomery."
Emily Ramler grabó siete álbumes de Hard Bop, Jazz, Blues y Jazz Fusión que se editaron en el famoso sello discográfico “Concord Records”. Sus discos muestran las diversas influencias de un artista que desarrolló rápidamente un estilo personal y distintivo en versiones de clásicos del Jazz y del Blues. Su primer álbum como líder de un grupo, “Firefly”, consiguió un éxito inmediato y su guitarra de Hard Bop en su siguiente disco, “Take Two”, fue igualmente muy bien recibida. “Transitions” y “Catwalk” marcan un cambio musical ante la necesidad de escribir sus propios temas, todos de una calidad magnifica, mientras que su admiración por Wes Montgomery brillaba en el elegante y estilístico “East to Wes”.



“Cuando la sección rítmica fluye y parece flotar, yo también lo hago con ella, consiguiendo un sentimiento maravilloso que siento en mi estomago. Si la sección rítmica realmente tiene swing, es un sentimiento tan grande que solo deseas reír.” — Emily Remler

Además de su carrera discográfica en solitario, como líder de un grupo y compositora, Emily Remler tocó en diversos grupos de Blues de Broadway, y con artistas tan diversos como Larry Coryell, con quien grabó un álbum titulado “Together”, la genial cantante Rosemary Clooney o como guitarrista para Astrud Gilberto. También tocó en la versión de Los Angeles del excelente espectáculo “Sophisticated Ladies”, entre 1981 y 1982, y produjo dos populares videos de enseñanza para guitarra avanzada. En 1985 ganó el premio internacional “Guitarist Of The Year”, que otorga la prestigiosa revista “DownBeat Jazz Magazine”. En 1988 fue distinguida como “Artista del Año” por la “Duquesne University”, y en 1989 recibió el premio “Distinguished Alumni” de la “Berklee College of Music”.
Su vida personal no fue tan exitosa como su carrera profesional, en 1981 contrajo matrimonio con el pianista de Jazz Jamaicano, Monty Alexander, y se divorció en 1984, tres años más tarde.

Cuando se le preguntaba como quería ser recordada Emily recalcó: "Buenas composiciones, memorables interpretaciones de guitarra, y mi contribución como mujer al mundo de la música. Pero creo que la música lo es todo y no tiene nada que ver con movimientos políticos o de liberación de la mujer."
Después de su muerte, se editaron dos álbumes tributo, “Just Friends” volumen 1 y 2, que presentaban contribuciones de artistas de la talla de Herb Ellis, David Benoit, Bill O’Connell y David Beberg, entre muchos otros. En 2006 The Skip Heller Quartet grabó una canción titulada "Emily Remler" en su memoria. Su enorme potencial, desgraciadamente, quedó bruscamente truncado a la edad de 32 años, dejando una plaza vacía que será muy difícil de ocupar. Su historia no es la de un artista [i]underground[/b], como el resto de grupo y músicos que aparecen es este [i]post[/b], pero sí lo es el gran olvido en el que ha caído esta genio de la guitarra en los últimos 20 años. EN SU MEMORIA.

Peace & Quiet fue un grupo Americano de Hard Rock de diversas influencias originario de Miami, otro de tantos grupos olvidados de finales de los sesenta, cuyo estilo músical, al contrario de los que muchos aficionados han creído durante mucho tiempo, debido en parte a la portada tan pintoresca de su único disco, estaría en la onda de unos Led Zeppelin, Mountain, Deep Purple o Grand Funk Raildroad. Pese a la poca difusión y propaganda que se ha hecho de su único trabajo, en blogs de internet especializados en este tipo de música, Peace & Quiet no eran el típico grupo de Hard Rock de segunda fila que consiguió grabar en un sello modesto. Todo lo contrario, en cuanto a reconocimiento y ventas puede ser considerado de "segunda fila", pero en cuanto a calidad Peace & Quiet estaba a la altura de los mejores grupos del género y su disco fue editado por el poderoso sello discográfico "CBS". En cuanto a su historia, como otras tantas en esos años, es la historia de una lucha constante contra la adversidad y el duro entorno donde les tocó vivir y nacer como grupo. Peace & Quiet tuvieron el mérito de ser capaces de crecer hasta convertirse en un grupo maduro y profesional y llegar a grabar un disco en un entorno y unas circunstancias realmente adversas. Desafortunadamente, como tantísimos otros grupos de su época, hay muy poca información disponible sobre ellos. De la pocas noticias que ha llegado hasta nosotros, sobre el grupo, sabemos que eran originarios de Miami, un duro lugar a finales de los 60s para un grupo de Hard Rock, y que sus raíces se remontan a otra banda de su localidad llamada Bad Boys (1967), también conocida como The Nervous System, que llegaron a editar un single en 1967, “Make Love, Not War / Bones". El embrión de Peace & Quiet se hallaba en The Nervous System, más de la mitad de sus miembros formarían parte, posteriormente a su ruptura, de Peace & Quiet. Roger Pavlica (guitarra solista), Dennis Gent (RIP 2002), (batería), Chuck Witherow (órgano) y Jim Keegan (bajo) fueron los primeros miembros de los futuros Peace & Quiet. En 1970, Jim Keegan y Dennis Gent dejan el grupo cuando tres nuevos miembros, y futuras piezas fundamentales, se unen al mismo, Jim Tolliver, (bajo), Gregg Williams, (batería), y el excelente cantante Rick Steele. En ese momento, Febrero de 1971, el grupo experimenta un cambio en su dirección musical hacia sonidos más duros, cambiando su nombre por Peace & Quiet. Antes de unirse al grupo, el excelente cantante Rick Steele había formado parte de varios grupos del sur de Florida, entre ellos The Villagers, y el bajista Jim Tolliver, el de más experiencia, había seguido un camino similar al de Steele, llegando a grabar con The Birdwatchers y Razor's Edge. Con esfuerzo y mucha constancia Peace & Quiet se labraron una muy buena reputación en la durísima escena musical de Miami y el sur de Florida, llegando a ser casi una leyenda, actuando en las escasas y pintorescas “salas” de Rock de Miami, “Thee Image”, una bolera reconvertida el sala de Rock, “Pirates World”, un estupido parque de atracciones en el que se daban conciertos de todo tipo, o “The Jai-Alai Fronton”, una sala ideada para deportes destinados a un publico Latino que se rediseñó y "legalizó" para el juego, legal o ilegal. En esa época, la escena musical de Miami no era todo lo halagüeña que se podría esperar y era un lugar muy duro para un grupo musical de cualquier tipo, y mucho menos para uno de Hard Rock. Al contrario de casi todo lo demás en la ciudad, el Rock no tenía nada que ver con la industria del turismo. En 1970, la escena musical de Rock y Pop aún no estaba legislada y las operaciones ilegales ideadas por los más sórdidos promotores, que invariablemente se las ingeniaban para desaparecer por la puerta accesoria con todos los ingresos, eran lo más frecuente. Pocas veces Peace & Quiet obtuvieron beneficios de sus actuaciones y de su propio bolsillo se tenian que costear el seguir adelante como grupo. El tiempo y el clima en Miami era maravilloso, pero añadimos a la buena climatología los llamativos edificios de la ciudad, las feas atracciones turísticas y el arte comercial, y la magnifica temperatura y clima tan solo realzaban el total letargo del Miami de los 70s. Los nacidos en la ciudad normalmente no se acercaban a los sitios de moda y, en su lugar, nadaban, navegaban y hacían música en las noches estrelladas perfumas de jazmín. Miami era un lugar perfecto para pasar las vacaciones, descansar y soñar, pero un lugar muy difícil para formar un grupo de Hard Rock. De hecho, los habitantes de Miami habían sentido la opresión cultural de su país desde hacia mucho tiempo y su interés por la música se reducía, mayoritariamente, a la popular. Por todo esto, el hecho de que un grupo como Peace & Quiet consiguieran convertirse en una banda compacta y compenetrada, y lograran emerger y salir adelante en semejantes condiciones, es una hazaña realmente increíble, y aun más increíble teniendo en cuenta el buen nivel y la calidad que llegó a tener el grupo en esos años. En directo eran poderosos, compactos y sus interpretaciones tenían una profesionalidad y calidad que pocos grupos de Hard Rock del momento podrían igualar. En Mayo de 1970 el grupo logró llamar la atención de un ejecutuvo musical del importante sello “CBS” y consiguen firmar un contrato discográfico para la grabación de un álbum. En ese momento, en su pico más alto de calidad, el grupo estaba compuesto por el cantante Rick Steele, el bajista Jim Tolliver, el guitarrista Roger Pavlica, el teclista Chuck Witherow y el batería Gregg Williams, en definitiva la formación original del grupo. Por razones que se desconocen, el grupo se trasladó a vivir a Massachussets en Agosto de 1970, antes de entrar en el estudio de grabación, y luego su sello, “CBS”, les envió a Nueva York para grabar su primer álbum, el homónimo "Peace & Quiet". Para apoyar al grupo, y sus potentes composiciones, la discográfica les asignó como productor a Larry Fallon, un emergente productor y arreglista que, entre otros, habia participado en la produccion y arreglos del legendario álbum "Astral Weeks" de Van Morrison. Su álbum de debut, único disco editado por el grupo, fue un trabajo realmente sólido y sin fisuras. En él, el grupo nos presenta seis temas de puro Hard Rock repleto de energía, sencillez y honradez. Temas como “Looney Tunes”, “You Can Wait Till Tomorrow” o “Country Thing”, son buenas composiciones de Hard Rock, con toques del vecino sonido West Coast y algún desarrollo ocasional típico del Progresivo de moda en esos años, pero siempre con el gancho, la clase y la energía de Peace & Quiet y el Hard Rock clásico de los 70s. Desde el mismo comienzo, lo que primero nos llama la atención es la potente voz de Steele, que le da un toque personal y destacado al álbum. Los seis temas presentan poderosos riffs y pegadizos de guitarras, potente base ritmica y el atmosférico sonido de órgano propio de su tiempo, siempre presente en cada tema. La interpretación es compacta, limpia y llena de entusiasmo, con el mismo sonido, directo y personal, en todo el disco. Los mejores temas son “You Can Wait Till Tomorrow", que abre el disco con un riff pegadizo y lleno de la magia y la frescura de los 70s, y el instrumental que cierra el disco “Looney Tunes”, potente tema de Hard Rock contundente que podria haber grabado cualquier grupo de primer nivel en aquellos años, (o cualquier grupo de vuelta a los setenta de la actualidad por su sonido atemporal). El disco se editó en Miami, Florida, en Febrero de 1971, bajo el sello “Kinetic Records”, (Z 30315), subsidiario de “CBS”, y presentaba una curiosa y extraña portada que no ayudó para nada a las ventas del mismo. El disco se había editado en una época en que el Rock Progresivo y el Rock experimental estaba en alza y este tipo de portadas "pintorescas" se asoció, extrañamente, a un grupo de esas características. ¡ Incluso hubo quien lo asoció al Kraut Rock venido de Europa !. Lo curioso es que la historia se repetiría, más aún si cabe, tres décadas después. Es una pena que la compañia discografica no hubiera elegido la foto del grupo que aparece en la contraportada del disco original, ya que tan solo viendo el "look" del grupo a muchos se le hubieran acabado las didas sobre que tipo de musica contenia el disco. ¡ Podria ser el "look" de cualquier grupo actual de Hard Rock, Metal o Stoner. Fuese lo que fusese, lo cierto es que las ventas fueron discretas y no se llegó a editar ningún single del mismo. En el verano de 1971 el grupo realizó una pequeña y destacada gira por Miami y el sur de Florida y poco después, por problemas internos, empezaron las idas y venidas en el grupo. De finales de 1971 a 1972, pasaron por el grupo Steve Hatch, batería, Brad Peed, guitarra, Reuben David Ferguson, cantante y teclados, hasta que a finales de 1972 unos desconocidos Peace & Quiet dejan de existir para siempre como grupo.

“PEACE & QUIET, EL DISCO”.

"Peace & Quiet" fue producido y arreglado por Larry Falon, el propio grupo y Wally Meyrowitz, y los ingenieros de sonido fueron Tony Bongiovi y Mallory Earle. Aquí debemos hacer un punto y aparte y destacar el nombre del productor del disco, Larry Falon, como parte destacada en el del disco. Al contrario de lo que suele suceder con este tipo de grupos olvidados y de efímera vida, algunas de las personas que participaron en la grabación de sus discos, o en sus cortas carreras musicales de una forma u otra, no pasaron tan desapercibidos ni tuvieron tan mala suerte, con el paso de los años, como los propio artistas o grupos, logrando cierta relevancia en el mundo de la música. Este es el caso de Larry Falon, cuya importancia en el mundo de la música hace que este tipo de trabajos perdidos en el tiempo adquieran aún más importancia para todos los amantes de toda esta intrahistoria del Rock por el simple peso de su nombre. Con el paso de los años, Larry Fallon se convirtió en productor, compositor, pianista, arreglista, intérprete y director musical de inmenso éxito en Estados Unidos. Su legado musical incluye la dirección musical, orquestación, arreglos y composición para importantes obras musicales de Broadway, como "Seesaw", "Barnum", o "Peg", esta última protagonizada por Peggy Lee, y ha compuesto y dirigido bandas sonoras para películas como “Rubys Dream", con Joe Pesci, "Hellhunters", con Stewart Granger, o "Gimme Shelter" de los Rolling Stones. En sus más cincuenta años de experiencia en el negocio de la música, el Jazz, y el mundo del entretenimiento ha producido y arreglado mas de 67 álbumes de artistas de la talla de George Burns, Danny Aiello, Gloria Lynne, Jimi Hendrix, Gil Scott-Heron, Bob Marley, Jimmy Cliff, Morgana King, Mark Murphy, Richard Davis, sin olvidar el mítico “Astal Weeks” de Van Morrison. Si después de leer este inmenso currículo te preguntas ¿y este hombre produjo en en 1971 un disco de puro Hard Rock ?, espera a oírlo y tu asombro será aún mayor. Esta era la magia de los 70.

El disco de abre a lo grande, con el potente y pegadizo “You Can Wait Hill Tomorrow”, un tema compuesto por el bajista Jim Tollver que pone de manifiesto las raíces Hard Rock del grupo y su gran talento, y nos muestra que estamos ante una banda y un disco muy a tener en cuenta y con muchísimas posibilidades. Lo primero que llama la atención es la voz del cantante solista Rick Steel, perfecta para el Hard Rock, poderosa, desgarrada y con mucha personalidad, muy en la onda de artistas coetáneos del grupo como Joe Cocker, Mark Stein, Steve Marriott o un primer David Coverdale. El pegadizo riff de guitarra y órgano es potente y a la vez con ese gancho de los grupos clasicos como Grand Funk, Led Zeppelin o Deep Purple. La guitarra de Pavlica lleva el peso del tema, con su potente sonido saturado, y el órgano Hammond de Chuck Witherow, le da la respuesta siempre en primer plano junto a la guitarra. Steele canta con poder, pero a la vez con melodía, control y sentimiento. La guitarra de Roger Pavlica tiene una labor destaca en este tema, sobre todo en los solos que jalonan todo el tema, muy destacados en las mezclas, con esa cualidad rítmica y melódica característica de su estilo, al igual que la poderosa base rítmica configurada por Gregg Williams y el autor del tema, el excelente bajista Jim Tolliver. Williams tiene un estilo hábil e incansable y es perfecto para marcar los energicos ritmos del grupo y junto a Jim Tolliver proporcionan una sólida base rítmica para la experta guitarra de Roger Pavlica y el uniforme y sutil órgano de Chuck Witherow. El sonido del grupo es sólido y compacto, sin fisuras. “You Can Wait Till Tomorrow” es uno de los mejores temas del disco y nos regala uno de los mejores riffs del vinilo, al más puro estilo Hard Rock de los 70s.
Desde este primer tema, y hasta el último, la producción de Larry Falon y las mezclas Falon, Bongiovi y Earle se antojan perfectas para el sonido del grupo y de su música, una producción que sigue unos esquemas casi invariables en todo el disco: guitarras rítmica y solista en canal izquierdo, órgano en canal derecha, (o viceversa), y bajo y batería en el centro, junto a la voz, esta ultima siempre arriba. “Margo's Leaving Song (Got To Go Away)”, de Tolliver y Steele, se nos presenta con una interesante introducción melódica de órgano, a la que van uniendo líneas de bajo y batería, y un invitado de lujo, Jerry Goodman del grupo The Flock, y su inolvidable y hermoso violín. Este buen medio tiempo, que habla de hacer las maletas y partir en la próxima luna rompiendo ataduras y lazos con el lugar dónde resides en pos de aventura y nuevos horizontes, nos ofrece otra buena interpretación de Steele cantando con más sentimiento que nunca, se añaden buenas armonías vocales y una labor de violín, a dobles tracks, maravillosas. Las partes de guitarras solista, de sonido limpio esta vez, y de bajo, presentan unas cualidades muy melódicas, perfectas para este tema. “Margo´s Leaving Song” es realzado por las hermosas partes de violín de Jerry Goodman. El bajo de Tolliver es especialmente melódico en este tema. Después de seguir las cuidadosas instrucciones esbozadas en “Margo´s Leaving Song”, siguen “Country Thing”, “Hear My Love” y “Black Mountain”. Los tres temas hablan del país y, pese a sus títulos, no tienen nada que ver con la música Country, como apuntan diferentes comentarios en varios Blogs de internet. Los tres temas hablan de la frescura y honestidad de vivir en Miami, pero sin mostrar la idílica vida rural típica de la música popular de la ciudad y su fastidiosa y molesta moda de vuelta a las raíces. Estos tres temas tratan de la sencillez y la belleza y su forma y estilo es puro Hard Rock con influencias del sonido West Coast y el Progresivo. Cada tema tiene la suficiente duración para ofrecernos una multitud de deliciosos riffs, tanto de guitarra como de órgano o de bajo, en un estilo característico de las Jam Sessions tan habituales en esos años, con partes destacadísimas del batería Gregg Williams.
El tema “Country Thing”, compuesto por todo el grupo, tiene un comienzo interesante, con un complejo riff de bajo/guitarra/órgano, de sonido bastante actual, que da paso a diversos desarrollos en los que el trabajo de batería de Gregg Williams es realmente excelente. Las partes de bajo de Jim Tolliver son especialmente interesantes, al igual que las de bajo de Jim Tolliver. “Country Thing” es un tema con claras influencias del sonido West Coast, con una estructura compleja, dentro del repertorio de Peace & Quiet, que entra con cierta dificultad pero que, una vez que lo hace, engancha como ninguno. Relajados solos de guitarra de Roger Pavlica, a doble tracks, se intercalan durante todo el tema, y junto al destacado trabajo de órgano de Chuck Witherow, y el bajo de Tolliver, se marcan un pequeño dialogo casual a modo de Jam Session en momentos puntuales. Destacar nuevamente la labor vocal de Steele, con una voz más desgarrada y personal que nunca, un auténtico numero uno en su estilo. "Hear My Love” , compuesto por Tolliver y Witherow, es un nuevo y excelente medio tiempo que nos presenta un pegadizo riff de guitarra/bajo con destacado trabajo de Pavlica a las seis cuerdas, líneas de bajo muy melódicas a cargo de Tolliver, y la presencia destacada y atmosférica del órgano de Witherow. No en vano son los dos compositores del tema. Buen trabajo vocal y buenas armonías vocales. Este tema nos presenta un medio tiempo que mezcla el Hard Rock y el sentimiento West Coast con un estilo muy a la Americana. En la mitad del tema hay un cambio de tiempo y la guitarra de Pavlica nos regala una nueva y breve improvisación sobre una base rítmica de apoyo realmente trepidante.
“Black Mountain”, compuesto por Pavlica y Steele, nos ofrece un inicio trepidante con un nuevo riff de guitarra/bajo, esta vez algo más complejo, casi con cualidades de Rock Progresivo y sonido actual, que a medida que vanza se va transformando en otro tema de Hard Rock de cualidades melódicas y atractivas, con buenos cambios de tiempo, estrofas atractivas y un estribillo muy melódico, con continuas improvisaciones de guitarra a cargo de Pavlica y una labor de batería y bajo, siguiendo la estela de la guitarra, muy destacada. Nuevamente, el órgano de Witherow esta muy presente, no realiza labores solistas destacadas pero siempre da apoyo, sensibilidad y profundidad a este tipo de temas. Los solos de Pavlica siguen siendo rítmicos y melódicos y su labor destaca del resto. “Black Mountain” es otro tema de Hard Rock con influencias West Coast y un sonido muy la Americana. Y sin demora el disco llega a su final de forma magistral, con el mejor tema del disco, “Looney Tunes", un instrumental compuesto por toda la banda que nos regala un riff de guitarra/bajo/órgano poderoso y dinámico, excelentes improvisaciones de guitarra y órgano, a veces a dos canales y en dobles tracks, de sonido potente y perfecto, y una labor de bajo y batería descomunal. La guitarra de Pavlica se destaca improvisando en todo el tema a un gran nivel, compaginando los licks y solos sencillos y llenos de feeling, al estilo de los setenta, con otros mas complejos, y todo con un sonido soberbio y una compenetración con el sentimiento del tema genial. Puede repetir el mismo lick setentero durante largo rato tan solo para hacer que el clima y la intensidad del tema aumente, ¡ y el resultado es genial !. El trabajo de Tolliver al bajo es técnico e incansable, y todo el grupo suena realmente bien y con una calidad excelente. “Looney Tunes" es un instrumental lleno de frescura y poder, con improvisaciones de guitarras, órgano, bajo y batería a modo de Jam Session casual, pero siempre sin perder de vista la estructura principal del tema. Hacia el final hay un cambio de tiempo con original percusión, de bongos o congas, y un potente solo de bajo y batería de Tolliver y Williams. La guitarra de Pavlica ejecuta dobles solos, en ambos canales, demostrando su dominio más que perfecto de su instrumento. Chuck Witherow y su órgano se animan también en el intercambio de dialogos y golpes musicales, y al compás de un ritmo trepidante, inexorable, la guitarra, el órgano, el bajo y la batería comienzan su personal charla entrando y saliendo en esta excelente y sudorosa Jam Session donde cada miembro tiene su momento de lucimiento y demuestran su gran calidad instrumental. Y lo mejor, no se pasan en sus labores solistas, de tal forma que el tema mantiene su poderosa pegada hasta el final sin excesos instrumentales. Temazo de Hard Rock enérgico de 8 minutos dónde nunca se pierde la estructura, la intensidad ni el feeling. Un breve solo de batería marca su final con toda la banda a plena potencia. “Looney Tunes” es un collage instrumental de puro Hard Rock que incorpora muchos temas y visiones familiares de los mejores grupos del género a medida que se va desarrollando hasta llegar a su magnífico crescendo sonoro.

Peace & Quiet es, en resumidas cuantas, y tal y como lo describió Barbara Bothwell en la carátula de la edición original de “Peace & Quiet” son:

“Peace & Quiet, Paz y Tranquilidad, no es precisamente la esencia del grupo. Su esencia es la esencia de los mejores grupos del género. La honestidad, la constancia y el sacrificio en pos de una meta, de un fín, son el sello personal de su música y de su estilo. En su reconfortante, potente y enorme sonido podemos oír y ver un montón de cosas que te harán reír y sentir bien. Puedes oír el chapotear de las olas del mar contra el muelle de Biscayne Bay, y sentir la hierba de Coconut Park entre los dedos desnudos de tus pies”. (Barbara Bothwell)

Lamentablemente, el disco tan sólo dura 36 minutos, pero nos queda el consuelo de que la escasa duración vale mucho la pena. Es una verdadera satisfaccion tropezar de vez en cuando con un disco como este, un trabajo de Hard Rock honesto, directo y sin pretensiones, solo alegrarte el día. Un disco que ha permanecido inédito durante mas de tres décadas, hasta que fue reeditado en 2004 en CD, a través de la colaboracion de los sellos Alemanes “CMP” y "Green Tree". Como ya apuntaba antes, lo curioso es que la historia de este disco se volvería a repetir tres décadas después, cuando los aficionados y coleccionistas de la música de los setenta volvieron a relacionar la extraña portada de este disco con el Rock Progresivo y el Kraut Rock, dado que había sido reeditado, precisamente, por dos conocidos sellos Alemanes, quedando nuevamente alejado del público amante del vibrante Hard Rock clásico de los 70s. Una verdadera lástima. Esperemos que ahora sean muchos más los Rockeros que le den una oportunidad a esta obra directa, sencilla y honesta, como nos gusta a muchos de la vieja escuela, un disco perfecto para alejar las penas de un duro dia lleno de problemas y alegrarte el alma.