RONDA 32ª DEL CONCURSO DE MICRORRELATOS DEL FOROAZKENA: EDICIÓN HOMENAJE A LA ESTULTICIA

La frase para esta ronda es:


Más tonto que...

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REGLAS DEL CONCURSO:

REGISTRO HISTÓRICO:

ACTAS DE ESTA EDICION, HASTA LA GALA ACTUAL:

CLASIFICACIÓN IV EDICIÓN:

RELATOS A CONCURSO:


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1.- Dinastía

Más tonto que la Elena le ha dicho Iñaki al de prisiones mientras se agarraba el paquete y escupía al suelo de que hacía puenting de noche era lo de su parienta que hacía planking en Suiza con el dildo de castigo dentro  porque le se hacía er chocho pesicola y no te jode colega que el día de su cincuenta y un avo cumpleaños va y se pone Felipe que lleva un mes haciendo owling en la espera de consultas del IRPF de la Agencia Tributaria que peligro colega, dan más miedo que una vieja con el pelo largo. Lo tengo grabao, Sofi.  Venga, te cuelgo que pasa un oso.

***

2.- Jessie owens

"Más tonto que Abundio", dije en mi primer día en el nuevo colegio.
"Yo soy Abundio y mi padre también se llama así". Una voz detrás de mi silla me heló la sangre.
Cuando me giré para verlo de reojo, vi un muchacho tan grande como una montaña que me susurró: "nos vemos en el recreo".
Y entonces me aficioné a correr.

***

3.- Pablo

Más tonto que mi vecino no habrá muchos. Hablo de alguien que le ha regalado a su padre un caleidoscopio aun siendo ciego. Se escuda en que su padre es fan de The Beatles y como Lucy es la chica de ojos caleidoscópicos pues le haría ilusión... Su hermana, Lucía, me ha dicho que sinceramente cree que su hermano venía con tara, pero nunca lo quisieron estudiar por el que dirán.
Desde que me dijo eso se me viene muchas veces al pensamiento Pablo (el tonto) porque a lo mejor es cierto y viene con defecto de fábrica. Eso explicaría que el día que se le cerró la puerta estando él en el descansillo y sin nadie dentro llamase insistentemente al timbre o que haya llamado a su tortuga cerresiete teniendo treinta y dos años (él, no la tortuga).
Desde entonces me pregunto cuántos Pablos habrá en el mundo.

***

4.- Manifiesto antinatalista

Más tonto que la pretensión infantil de que las cosas tengan algún sentido. No lo tienen. Cada niño que nace es un condenado a muerte. Resulta necesario asumir que el final siempre es el mismo, perentorio reconocer la absurdidad de los planes que esbozamos, de las relaciones que comenzamos. El universo no conspira a tu favor, asúmelo, a nivel cósmico al universo le importas tres cojones. Tu destino está sujeto a un albur, sin más. Y el amor no revierte en una fuerza redentora; al revés, te hará sufrir. Así, sé hiperconsciente de que aquello que más temas (la enfermedad, el luto, la soledad) será precisamente aquello que ocurra. ¿Entonces? Entonces, nada. Las cartas están marcadas, amigo. Todo resulta absurdo, ridículo, rematadamente triste: el dolor por el dolor. Enfrenta, pues, este arrecife del desasosiego, rompe con el ciclo macabro, ¡apostata! ¿Por qué imaginar a Sísifo feliz? ¿Por qué seguir cantando?

***

5.- Mi reloj de arena

Más tonta que cualquiera de los que estamos aquí, porque escribo estupideces sobre chapotear entre charcos de mosto y reinetas chafadas, se mofan y chillan los lunáticos. Ayer soñé con mi hermanastro y el lagar. Y la maza. Sueños de tonta. Hora de tus pastillas, ordena la doctora, y las tomo. Entristezco, nariz pegada al acristalado muro de mi prisión, sintiendo la arena deslizarse bajo mis pies hacia el vórtice de vuestro ajeno mundo, y me arrastra, y lucho, braceo, pero soy tragada a través del diminuto agujero y caigo, y un hilo inexorable de arena llueve sobre mí y me hundo. Me ahogo, aunque ella os dice que estoy mejor, y queréis creer y marcháis, como tras cada menguante visita. Con el paso de las horas siento todo voltearse, y nuevamente ácidos recuerdos de manzana salpicada en sangre, y odio, y maza. Entonces vuelvo a escribir tonterías. Mientras, la arena cae.

***

6.- A fuerza de intentarlo


—«Más tonto que...» no se me ocurre, señor Woodward. Puedo comparar la estatura con Long Jim, el camarero indio; la gordura con la señora Escovedo, ya sabe, la encargada de limpiar las aulas, cosas así. Pero comparar la tontuna, ¿se dice así?, no me sale.
—Elige a alguien tonto, no debe ser tan difícil.
—Eso pensaba, pero nadie parece realmente tonto. Puedo compararlo en broma: más tonto que una escoba yendo a la peluquería; suena extraño, ¿no cree?, perdería su utilidad, su esencia. Con una persona no me sale, señor Woodward. Cualquiera que pueda imaginar es listo o hábil en alguna materia.
—¿Y más tonto que tú?
—No serviría. Sabe que soy más listo que todos.
—¿Y probar conmigo? Más tonto que el señor Woodward.
—No lo había contemplado; su apellido ¿sabe?, suena tan severo, tan conservador. Quizá si...¿Puedo llamarle señor Smartless? Más tonto que el señor Smartless.

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7.- Recuerdos cómodos

"Más tonto que Peter". Descubrí aquella frase años ha, cuando tenía algo de pelo y solía rescatar libros de una antigua librería en Fillmore Street. Era de un libro raro, "Mojos". Los elegía al azar, intentaba sacar todas las frases curiosas de cada uno y las apuntaba para reutilizarlas en mis libros, cinco horas estrujando libros sin piedad hasta que me echaban por el cierre. Acto seguido salía disparado en busca de la tienda de comestibles más cercana, compraba una cajita de chocolatinas "el perrito feliz" y volvía con premura a la pensión para continuar con mi rutina. En total nueve horas recopilando, un acto triste y atroz. No sé qué era lo que tenía aquella rutina, me proporcionaba una calidez semejante al bostezo mañanero o al frotar de los dedos de los pies bajo las sábanas de franela. La comodidad era una bendición.

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8.- Crepuscule with Nellie

—Más tonto que...—Nellie reprimió el final de la frase en su cerebro. Otra vez lo había vuelto a hacer: girar ligeramente los cuadros y el reloj en la pared a sabiendas de su obsesión por la simetría y el orden. No eran pocos los que admiraban la abnegación de Nellie, la naturalidad con la que había cambiado su rol de esposa por el de madre y la estoicidad con que soportaba sus excentricidades. En muchos aspectos él no difería en nada de un niño dependiente y caprichoso. Pero sabía también que si cogía su mano y lo llevaba hasta un piano, él navegaría  en su frágil cascarón sobre un mar de ondulaciones sonoras hasta efímeras islas inexploradas y desconocidas. Incluso en los peores momentos, Nellie tuvo siempre la firme convicción de que sus composiciones perdurarían en el tiempo. Seguramente por eso, una de ellas lleva su nombre.

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9.- Virginia

"Más tonto que el Virginiano" era ya en el pueblo un "más tonto que Abundio" más. Al escucharlo, había veces que ni Virginia se veía identificada, aunque otras muchas se quedaba meditando, con mucha pena, en si era cierto aquello de que los subnormales y los suicidas no entraban en el cielo cuando el pobre se merecía ser recibido con el mejor de los "lasudos".
Pensar en el Virginiano le transportaba a su antigua panadería con la vergüenza del que calla un pecado. A Virginia el olor a pan le removía cosas por dentro a las que por puro pudor no quería poner nombre. Se sentía como la parte más viva de un pueblo que nunca había envejecido. Un pueblo rodeado por montañas que algunas mañanas parecían mecerse, como carne o como gelatina, entre una bruma de niebla que de tener algún olor tendría el de un pan recien hecho.

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10.- El tonto’l pueblo

—Más tonto que su padre incluso
—Y parecía imposible
—Vaya familia de raros...
Dos viejas mascullaban sentadas en un poyo a la sombra, mientras miraban a Toñín bajando por delante del lavadero...
Abajo, un grupo de niños atrapaba renacuajos en el riachuelo a la puerta del teleclub. Toñín apretó la mandíbula.
Empezaron los insultos y el corrillo, sintió la primera colleja y empezó a correr hasta casa...
Aquella madrugada, un zumbido ensordecedor despertó a todos. Un cono inmenso de luz naranja asomaba tras la casa de Paquita, parecía salir de la ermita.
La familia de Toñín salió de casa y atravesó las calles ante las temerosas miradas desde las ventanas, camino a la ermita. No se les volvió a ver.
Un año después decidieron entrar en su casa, y fue cuando descubrieron aquellas baldas llenas de mechones de pelo identificados con los nombres de los vecinos y fecha de recogida.


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11.- Ortodoxos

Más tonta que un zapato. Ha leído menos libros que Antonio Cassano. Tiene 43 años y ha decido que quiere ser Instagramer. Dice que es femenina, no feminista. Está haciendo un curso de Personal Shopper. No le gusta que sus hijas jueguen a fútbol “porque es de lesbianorras”. No se pierde un concierto de Dani Martín. Tiene un negocio que le permite vivir desahogadamente trabajando un par de horas al día.
¡Cuánta gente que parece gilipollas progresa en la vida sin tener que hacer grandes esfuerzos! El capitalismo reparte éxito a quien no cuestiona su esencia. En realidad, los premios se reparten entre quienes no se cuestionan nada, salvo el centro comercial donde consumir. Vamos por detrás en lo material, pero siempre nos quedará la superioridad moral como consuelo. Somos los inteligentes, los leídos, los intelectuales. Nos hacemos preguntas, debatimos, argumentamos, escribimos.
Vamos ganando.

***

12.- Closer (Cerca)

Más tonto que aquel momento que nos pareció tan mágico, dice mi aburrida madurez. Tonterías de adolescentes que engañan a sus padres para pasar un fin de semana juntos –ella en casa de Montse, yo en casa de Alberto, un plan perfecto-, en una época en que esas cosas debían hacerse para que las tonterías fueran mágicas. Para que una canción en un bar, un mar a oscuras y una habitación de hotel se llenara de arena y sexo inexperto.
Cómprale condones a tu hija, me dice mi cínica madurez. Irá donde tú, hará lo que tú, antes que tú.
¿Y la magia? Preguntaré yo.
Tonterías, dirá mi paternidad.
Y tendrá razón. Eras –erais- tontos. Y bastante felices, o al menos lo intentabais.
Y ahora, hazte el tonto. Porque tu hija no está en casa de Julia. O puede que sí. ¿Qué prefieres, papi?

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13.- Tengo sed

Más tonto que la propia existencia —efímera, como los ignorados latidos de la musaraña etrusca— es el devenir de los sucesos. ¿Acaso creemos que comprendemos, que llegamos a percibir el verdadero significado de todo y nada?
Siento pánico.
Salgo a la calle. Camino. Pateo una lata de cerveza abandonada sobre la acera. Observo los edificios. Es como una pieza de jazz: zigzagueos casi involuntarios que nos susurran desidia y desesperación.
Creo que ansiamos volar; pero no es un escape del mundo, sino el ignoto deseo de abandonar nuestro propio ser.
Nunca se trató de nosotros. Ni siquiera de intentar avanzar dentro de la vasta galaxia.
La pizzería Roma está abierta.
Entro, sigiloso; apenas saludando, apenas abriendo mis diminutos ojos.
—¿De qué la quiere?
—Ummmm —dudo.
—Tenemos la oferta de 2x1 en pizzas tipo calzone.
—De acuerdo… ¿me pones un par de latas de Negra Modelo?

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14.- Corrección

-¡Más tonto que Picio!
-Querrás decir Abundio.
-¡Y además redicho!

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15.- Y tú más

Más tonto que afeitar bombillas. Así era su estado anímico. Una tontería autoimpuesta. La tontería de la cobardía. Caía una y otra vez en el mismo bucle de dejarse llevar por la simpleza de otros seres inertes. Buscaba algo más. ¿Una conversación? ¿Una sonrisa de complicidad? Un destello de vida! Sin embargo, en vez de buscar la satisfacción, se rodeaba de la simpleza de gente que disfrutaría chupando pilas.
Por eso rompió su vida en pedazos. Rompió vínculos con lo que le frustraba y decidió trasladarse a la capital. Allí estadísticamente habría más tontos pero entre tanto tonto también trataría de toparse tarde o temprano con talentosos truhanes. La vida está llena de tontos, simplemente quería encontrar la clase de tontos que le hicieran feliz.

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16.- Losa

“Más tonto que tu hermano, que ya es decir”. Esa frase le acompañaba desde hace años, cuando su madre se la soltó en una de sus peleas.
Su hermano no es que fuera muy bueno en los estudios, pero siempre había estado ahí para él, por eso aquello le había estado taladrando el cerebro desde entonces. Ella nunca se había caracterizado por su tacto, ni por el cariño que se le presupone a un progenitor. Rara vez estaba en casa cuando él volvía, y cuando estaba, lo mejor que podía hacer era encerrarse para no soportar el hedor a alcohol que desprendía. Siempre que había intentado buscar su apoyo, le recibía con actitud de reproche. Por eso aprovechaba cualquier ocasión para escaparse y visitar a su hermano. Se desahogaba llorando hasta que conseguía calmarse. “Tu familia siempre te acompañará”, aquel epitafio siempre conseguía eclipsar a su madre y su cariño.

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17.- Paranoia

Más tonto quedó Emmett después del accidente, si cabe. Desde entonces su comportamiento es digamos… diferente. Se ocupa de todo, eso sí, de manera compulsiva. Es algo que agradezco pero todo tiene un límite. Me agobia. Sé que algo le pasa. Le insisto para que vaya al médico pero hace oídos sordos. Como con todo. Será tonto. Además intuyo que trama algo. Algo gordo quiero decir. Porque hacer cosas inusuales ya las hace. Y muchas. El otro día sin ir más lejos invitó a Gladys, la vecina, a cenar. Que oye, me parece bien aún sin consultarme. Pero que después de la apacible cena se encerraran en el dormitorio es bastante sospechoso. Juraría que hasta escuché jadeos. Se cree que soy tonta y el que queda en evidencia es él. Vaya, huelo que me he cagado encima. Y el tonto de Emmett sigue sin volver de la compra.

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18.- Silencio sepulcral

Más tonto que…
Lo siento, pero no tiene ningún sentido que la frase de inicio no sea una frase. Y me niego a colaborar en tus pijotadas anarcoburguesas.
La mía con menú grande y sin pepinillos.

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19.- Y, por supuesto, ganaré

Más tonto que un zapato. Más burro que un arao. Un verdadero zoquete. Ése soy yo. No he leído un libro desde que acabé el colegio. Algunos lo consideran un insulto y se creen superiores a nosotros, pero por fin ha llegado la hora de afirmarlo con orgullo. El tiempo en que vuestros profesores intentaron haceros creer que ser unos completos cazurros era algo de lo que avergonzarse ha terminado: ahora el poder es vuestro.
Con inteligencia os podría convencer de que no merecéis más que los demás y de que el mundo no os debe nada. Pero soy tonto de capirote, y la razón por la que me escucháis ahora mismo, y por la que me queréis, es porque, como todos los tontos de capirote, digo lo que pienso. Pese a quien le pese. Aunque sea una soberana idiotez.
Por eso me votaréis.

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20.- Vocabulario

—Más tonto que tú no existe nadie, Portillo. Conozco sujetos en posesión de cromosomas extra que ejecutarían tu desempeño con mayor diligencia y resolución.
El capitán Gómez no se andaba por las ramas con sus hombres. Si tenía que amonestarlos, reñirlos e incluso ridiculizarlos por una investigación defectuosa o una persecución fallida lo hacía sin temblarle las cuerdas vocales. Eso sí, siempre con un vocabulario exquisito. Por eso a Portillo le sorprendió que Gómez usara una palara tan vulgar como “tonto”, y no oligofánico u oligofénico o cómo se dijera el palabro ese que tanto le gustaba usar.
—¡Oligofrénico!
Ese era el término que Gómez buscaba y que su cerebro le había hurtado durante la reprimenda a Portillo. A solas, el capitán se secó el sudor. Perdía facultades. “La maldita senectud…”. Gómez pensó en su ya cercano retiro mientras acariciaba la cubierta de su amado María Moliner.

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21.- Casado

Más tonto que el de enmedio. Entre Vox y Cthulhudans.

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22.- Donde crecen las amapolas

Más tonto que Kostia no lo había; quizá más allá de la linde, pero no entre ellos. No sirvo para maquinar en la cúpula, decía Kostia enfundado en el rasposo saco de lana, no sirvo para el molino, las bestias me inspiran piedad y los hombres caballo me desprecian; soy el más tonto de este lugar. Kostia, y qué te dicen los ababoles. Que salte la linde, hermana. Pues entonces, debes saltarla.
Por la mañana, Oksana ofreció al ídolo dos conejos y un atado de rábanos. Luego acudió donde la cúpula. Tras maquinar las horas regladas, le apeteció visitar el campito de amapolas donde Kostia ensoñaba. Se acercó hasta la linde. Vetustos maderos la jalonaban; en uno, con mucho trabajo y un tosco filo, había algo grabado: las nubes corren veloces como los días. Mierda, pensó Oksana, y allí quedaron el cesto y su túnica roja.

***

23.- Otro

Más tonto. Más guapo, pero de esa guapura insulsa. Más alto y con gafas de pocas dioptrías. Quizás moreno. Pero sobre todo más tonto para que no pueda desentrañar ninguno de mis artificios ni mis trampas. Para que yo pueda esconderme algo. Para que no me desmorone con sus caricias precisas. Para que no tenga miedo a que se marche y para no querer huir.

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(24.-) Herencia

—Más tonta que tu madre –reemprendió con su vehemencia habitual–. No me mires así, sois igual de pusilánimes, siempre se lo dije. Siempre tenía que estar pendiente de ella.
Hacía tiempo que no le escuchaba, escrutaba absorta como se desbarataba la nube de humo sobre el cigarrillo olvidado en la letanía de reproches.
—Cobarde egoísta. Lo habría hecho mucho antes de no ser por mí. —Su voz se extinguía con él mientras se refugiaba en la alcoba sellada desde hacía seis meses ya. —Cuando salgas del instituto vienes inmediatamente, no me hagas ir a buscarte otra vez.
Desde la habitación donde su madre había claudicado, Miriam cogió su pesada mochila, dio una honda calada antes de arrojar la colilla todavía encendida a la rebosante papelera y tosiendo se encaminó hacia la puerta, escuchando el último “¿Cómo pudiste…?” mientras echaba la llave.

... Nelson?

Empiezan bien pronto los...

El cuerpo me pide bilis.

Sala, para que no haya líos y para no putear mucho a Blas, sería conveniente borrar el hilo del sondeo

ronda autobiográfica

RegSound escribió:Sala, para que no haya líos y para no putear mucho a Blas, sería conveniente borrar el hilo del sondeo

Pero... no sé.

Troy Mc Clure escribió:ronda autobiográfica

Ojo que Toro va 4º.

Peligra su puesto Champions.

salakov escribió:Ojo que Toro va 4º.

Peligra su puesto Champions.

Me da igual ir 4º que 10º....


Lo que me jode es ir detras tuyo, que era mi proposito para esta edicion

Pero bueno, 11 puntitos son recuperables, aunque como sigas escribiendo como el relato del ninja lo tengo imposible...

sapir escribió:

Troy Mc Clure escribió:ronda autobiográfica

m

Pero bueno!

Es una frase fantástica, llena de posibilidades.

¡No quiero quejas!

salakov escribió:Es una frase fantástica, llena de posibilidades.

¡No quiero quejas!

Como pedir al sol que no luzca...

salakov escribió:Es una frase fantástica, llena de posibilidades.

¡No quiero quejas!

Es una mieeeeerda que ni es frase ni es ná.

Es el recursos mas tòpico del monologuista que solo conoce a chiquito.

Y la banderola es tendenciosa.

Sugar Bug escribió:Y la banderola es tendenciosa.

Tienes razón. Falta Imanol Arias.

Una cosa, en el rollo ese que sale con los cumpleaños foreriles pone que hoy cumple años Stoneheart, así que por si acaso, zorionak!

Autista escribió:Una cosa, en el rollo ese que sale con los cumpleaños foreriles pone que hoy cumple años Stoneheart, así que por si acaso, zorionak!

Felicidades stoneheart!!!!

Más tonto que un microrrelatista buscando ideas dentro de una mente vacía...

Felicidades, Stone!!

Zorionak, neocostumbrista!

¡Llegan las primeras obras!

¿dónde está el tío que se quejaba de frases sin sujeto, verbo y predicado? 

Ya no me sorprende nada....

m

¿es la frase definitiva?
m

Lo es.

Y por mor del lenguaje inclusivo también se acepta: "Más tonta que...”.

Me gustará que la primera tanda sea al menos de 5 relatos.

¡Ánimo!

FdC


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Improvisación poética

Más tonto que Imanol Arias dando por culo a un bonobo que se la chupa a Álvaro Ojeda que le hace una macuca a Bertín Osborne que se queda embobado viendo una lavadora donde gira Risto Mejide que se folla a Roncero que se folla a Pablo Casado que se folla a Belén Esteban que se folla a Piqué a modo de centípedo mongólico sin fin y todos cantan felices yo soy español español español bueno Piqué no pero mesentiende.

ni puta idea salaka. eso sí, esta semana de cuadros se me han ocurrido 2

Troy Mc Clure escribió:ni puta idea salaka. eso sí, esta semana de cuadros se me han ocurrido 2

 ....
Mas tonto que estar mirando un cuadro de.....
Ale ya te doy la introducción. ...ahora improvisa tu.
Jajajaja. ....
m

Contento me tenéis.

salakov escribió:Contento me tenéis.

Pues anda que tu a saladin que le gusta empezar a leer el domingo....
m

Pues hasta que no junte 5, no publico.

¡Hala!

salakov escribió:Pues hasta que no junte 5, no publico.

¡Hala!

¿5 qué?

fritz escribió:

salakov escribió:Pues hasta que no junte 5, no publico.

¡Hala!

¿5 qué?

5 bolas de dragón.

salakov escribió:Pues hasta que no junte 5, no publico.

¡Hala!

¡O quience....no aflojes!

No tengo prisa.

estoy con las correcciones salaka. en breves te lo mando

Troy Mc Clure escribió:estoy con las correcciones salaka. en breves te lo mando

Ya tienes dos....animo.
m

cuando había que poner tilde en "ti"?

Troy Mc Clure escribió:cuando había que poner tilde en "ti"?

Cuando quiera salatilde
m

Troy Mc Clure escribió:cuando había que poner tilde en "ti"?

N-u-n-c-a.

salakov escribió:

Troy Mc Clure escribió:cuando había que poner tilde en "ti"?

N-u-n-c-a.

Por ahora....
m

Empezamos.

1.- Dinastía

Más tonto que la Elena le ha dicho Iñaki al de prisiones mientras se agarraba el paquete y escupía al suelo de que hacía puenting de noche era lo de su parienta que hacía planking en Suiza con el dildo de castigo dentro porque le se hacía er chocho pesicola y no te jode colega que el día de su cincuenta y un avo cumpleaños va y se pone Felipe que lleva un mes haciendo owling en la espera de consultas del IRPF de la Agencia Tributaria que peligro colega, dan más miedo que una vieja con el pelo largo. Lo tengo grabao, Sofi. Venga, te cuelgo que pasa un oso.

2.- Jessie owens

"Más tonto que Abundio", dije en mi primer día en el nuevo colegio.
"Yo soy Abundio y mi padre también se llama así". Una voz detrás de mi silla me heló la sangre.
Cuando me giré para verlo de reojo, vi un muchacho tan grande como una montaña que me susurró: "nos vemos en el recreo".
Y entonces me aficioné a correr.

3.- Pablo

Más tonto que mi vecino no habrá muchos. Hablo de alguien que le ha regalado a su padre un caleidoscopio aun siendo ciego. Se escuda en que su padre es fan de The Beatles y como Lucy es la chica de ojos caleidoscópicos pues le haría ilusión... Su hermana, Lucía, me ha dicho que sinceramente cree que su hermano venía con tara, pero nunca lo quisieron estudiar por el que dirán.
Desde que me dijo eso se me viene muchas veces al pensamiento Pablo (el tonto) porque a lo mejor es cierto y viene con defecto de fábrica. Eso explicaría que el día que se le cerró la puerta estando él en el descansillo y sin nadie dentro llamase insistentemente al timbre o que haya llamado a su tortuga cerresiete teniendo treinta y dos años (él, no la tortuga).
Desde entonces me pregunto cuántos Pablos habrá en el mundo.

4.- Manifiesto antinatalista

Más tonto que la pretensión infantil de que las cosas tengan algún sentido. No lo tienen. Cada niño que nace es un condenado a muerte. Resulta necesario asumir que el final siempre es el mismo, perentorio reconocer la absurdidad de los planes que esbozamos, de las relaciones que comenzamos. El universo no conspira a tu favor, asúmelo, a nivel cósmico al universo le importas tres cojones. Tu destino está sujeto a un albur, sin más. Y el amor no revierte en una fuerza redentora; al revés, te hará sufrir. Así, sé hiperconsciente de que aquello que más temas (la enfermedad, el luto, la soledad) será precisamente aquello que ocurra. ¿Entonces? Entonces, nada. Las cartas están marcadas, amigo. Todo resulta absurdo, ridículo, rematadamente triste: el dolor por el dolor. Enfrenta, pues, este arrecife del desasosiego, rompe con el ciclo macabro, ¡apostata! ¿Por qué imaginar a Sísifo feliz? ¿Por qué seguir cantando?